LA ESPAÑA FEMINISTA

La mujer, el 50% de la población, parte imprescindible de su continuidad por un lado y de su correcto funcionamiento por otro y aquí seguimos, hablando de derechos, de igualdad, de justicia. Quizás por que hemos perdido el sentido final de lo que ha sido el feminismo histórico, reconvertido en una lucha absurda por la igualdad a través de la discriminación positiva, que no deja de ser discriminación.

LORENZO PIRIZ-CARBONELL

Lorenzo Piriz Carbonell en Asociación la Tortuga de El Charco.

8/4/20254 min read

“La España Feminista”

Antes de comenzar aclaro que voy a tratar sobre las mujeres, féminas totales, que históricamente han destacado en España a través de los tiempos y que nadie se confunda con los llamados Movimientos Feministas que han estado intoxicando nuestra sociedad en los últimos años, no se si por que literalmente nos ha cagado un buitre o si en realidad nuestra permisividad buenista nos ha hecho tontos de capirote. Y como ya dije, recordemos con orgullo nuestra historia con las mujeres que realmente sin dejar de ser mujeres, contribuyeron con el enaltecimiento de hacer de España aquel país envidiable que por desgracia ahora ya no es. Y para dejarlo aun mas claro, no considero feminista al movimiento político destructor de la verdadera imagen de la mujer que han puesto en marcha los “Me Too” de USA junto con los LGTBIYZ y resto del alfabeto, de estos españolitos de la actualidad en conjunto con los mismos pares de la globalizada marca generación Z de hoy. Vaya batiburrillo. Y sigo sin entenderlo. En cambio quiero relatar lo que siempre he sabido del verdadero e histórico feminismo que en España desde los comienzos del siglo XIX ya ha venido consolidando sus raíces tan legitimas como veraces. Y es que para hablar del feminismo en sus orígenes hay que traer a colación a Mary Wollstonecraft, la primera filósofa feminista de la Historia, nacida en Inglaterra en 1759 y hoy considerada una de las mujeres mas trascendentales del mundo moderno. Escribió novelas, cuentos, ensayos, tratados, literatura infantil y relatos de viajes demostrando así que si un hombre en su época podía vivir de su intelecto una mujer no estaba menos capacitada para ello. En 1792 publica un libro muy controversial que tituló “Vindicación de los Derechos de la Mujer”, donde defiende los ideales de la recién instaurada Ilustración en contra de un mas que paranoico Conservadurismo que el sociólogo Burke, había conseguido implantar en los comportamientos de aquella Sociedad Inglesa como manual de seguimiento general, legal y bastante maniquea moral. Luchó por la igualdad de género a la par que sostuvo que la mujer siempre tenia que querer ser mujer y nunca una caricatura de la masculinidad depredadora de hembras. Muy joven dio a luz a una niña que llamada Sheley mas tarde sería la autora de la novela “Frankestein”, amen de una respetada escritora. De este avatar de parturienta esta inteligentísima mujer, enfermó de una sepsis y murió a una muy temprana edad. Su nombre es la piedra filosofal de lo que luego se desató como Feminismo Global. Y ahora recordemos para nunca olvidar que en la Historia del feminismo español destacan figuras como Concepción Arenal, pionera del movimiento para la igualdad de la mujer, quien luchó por sus derechos consiguiendo que la educación para todos y la consideración laboral se implantaran legalmente, faenas apoyadas por Clara Campoamor, que era política y abogada, fajándose con todas las leyes obsoletas hasta conseguir que el derecho al sufragio femenino fuera una realidad, aunque para ello los izquierdosos y progresistas del momento (léase socialistas de hoy) campando durante la Segunda República, se opusieran ferozmente a que la mujer alcanzará el justo derecho de opinar en las urnas. Perdieron...bueno, es que estos se caracterizan por perder siempre. Es su Historia.

Lo cierto es que la mujer consiguió su derecho electoral a la par que su derecho laboral y educacional. ¿Quien lo diría que fue así, verdad? Y no pasemos por alto a una feminista de verdad, decente, culta y ganadora del orgullo nacional que fue Victoria Kent, tan leguleya como política que si bien no coincidía con las ideas de las sufragistas de Campoamor, siempre las defendió apoyándolas, llegando a ser la primera mujer Directora General de Prisiones de España y por supuesto con el voto en contra de los progresistas, que con chulería peniana no la consideraban capaz de realizar tales responsabilidades gubernamentales. Y aunque hay muchas mas en el catálogo de feministas históricas no quiero terminar sin mencionar a Emilia Pardo Bazán, novelista, ensayista que marcó un antes y un después en la puesta en marcha de las consignas de los movimientos feministas ya nacidos, al proclamar que las mujeres con derechos como el hombre, con los mismos derechos, nunca dejan de ser ni mujeres ni hombres, sino personas y nada mas que eso, con la particularidad que la feminidad en la mujer debe ser imprescindible, como la caballerosidad en el hombre.

Inteligente y bonita aseveración.

El feminismo español fue en verdad la conquista de la mujer para avanzar en intelectualidad y derechos igualitarios. Hoy las feministas del payaseo, empoderamiento y circo, quizá por ignorancia y otras veces por inquina mal adquirida, creen que ser feminista es denostar lo masculino y de paso los logros conquistados con mucho esfuerzo por la España Feminista de verdad.

Deberían leer mas estas protestadoras mas gritonas que coherentes y enterarse que la mujer siempre será mujer y que por suerte, tanto las culturas, las tradiciones y hasta los comportamientos de la civilización siempre han dependido de ellas. A ver si volvemos a enterarnos que hay que darle al Cesar lo que siempre ha sido del Cesar y a la Mujer, lo que por fortuna siempre ha sido y será de la mujer. Lo demás es puro carnaval de políticas venidas a menos y de ignorantes cada vez, idas a mas. Todo cambiará. Y a leer amigos y amigas, que el saber no ocupa lugar.

Lorenzo Piriz Carbonell